Respuesta rápida: Son vastas nubes de gas y polvo en el espacio, que brillan con luz propia o reflejan la luz de estrellas cercanas. Algunas nebulosas provienen del gas y el polvo expulsado por la explosión de una estrella moribunda, como una supernova y otras son regiones donde comienzan a formarse nuevas estrellas.
¿Cómo se forman?
Nebulosas de supernovas: Se forman a partir de la explosión de una estrella masiva (supernovas), este proceso expulsa las capas externas de la estrella al espacio, creando una nube de gas y polvo que se expande rápidamente formando estas «nubes».
Un ejemplo de este tipo de nebulosas es la Nebulosa del Cangrejo:
Nebulosas Planetarias: Las estrellas de masa baja y media, como nuestro Sol, no terminan en explosiones supernova, pero al final de su vida, expulsan lentamente sus capas exteriores de gas cuando agotan su combustible nuclear. Este gas forma una nube alrededor del núcleo de la estrella, que queda expuesto como una enana blanca.
Un ejemplo de nebulosa planetaria es la Nebulosa del anillo:
Nebulosas de Emisión y Reflexión: Se forman a partir de grandes nubes de gas y polvo interestelar que existen en las galaxias, a menudo compuestas principalmente por hidrógeno, el gas puede colapsar bajo su propia gravedad para formar estrellas.
Si estas nubes están cerca de estrellas jóvenes y calientes, las estrellas ionizan el gas, haciéndolo brillar en un proceso conocido como nebulosa de emisión y si la nube está cerca de estrellas, pero no lo suficientemente cerca como para ionizar el gas, la luz de las estrellas se refleja en el polvo, creando una nebulosa de reflexión.
La Nebulosa de Orión es un ejemplo de este tipo de nebulosas:
¿Cómo brillan estos elementos?
El brillo y colores de los elementos en las nebulosas es un proceso fascinante que ocurre cuando la radiación de estrellas cercanas interactúa con la nebulosa, provocando que los átomos y moléculas emitan luz en diferentes longitudes de onda.
el hidrógeno brilla en rojo, mientras que el oxígeno lo hace en verde o azul.
- Hidrógeno (H): Produce un brillo rojo característico en muchas nebulosas de emisión.
- Oxígeno (O): Responsable de emitir luz en el rango de verde-azul, lo que le da a algunas nebulosas un tono verdoso (común en las nebulosas planetarias).
- Nitrógeno (N): También emite luz en la parte roja del espectro, aunque no es tan brillante como el hidrógeno.
- Azufre (S): Produce una emisión en la parte del espectro cercana al rojo oscuro. Aunque no es tan visible a simple vista, contribuye al brillo en algunas nebulosas.
- Helio (He): Emite luz principalmente en el ultravioleta, pero también tiene líneas de emisión en el rango del visible, como un tenue azul.
Conclusión:
Las nebulosas no solo son espectáculos visuales en el cielo nocturno, sino que forman parte del ciclo de vida estelar. Desde la creación de nuevas estrellas hasta testigos de estrellas que han muerto, las nebulosas representan el constante reciclaje de material cósmico y una registro del mismo.